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Cáncer de páncreas

Por:  Sylvia A. Agostini
editorial@placerespr.com

En octubre de 2003 Steve Jobs, líder de la informática y co-fundador de la compañía Apple Computer, notificó al público norteamericano que padecía de cáncer de páncreas. Cuando decidió contar en un reportaje la historia de su proceso médico, nos enteramos de que había optado por continuar con un tratamiento alterno a base de dieta y productos particulares.  Sin embargo, sus médicos habían recomendado una cirugía inmediata, pues  el cancer que padecía era uno de un tipo poco común, pero con un buen pronóstico, porque estaba en su etapa inicial.  El joven “gurú” de la informática murió a los 54 años de edad, 11 años después de recibir su diagnóstico inicial.

Lo anterior nos demuestra que tener un médico primario, que una o dos veces al año nos haga pruebas rutinarias, puede ser determinante para una detección temprana de una enfermedad que actúa rápido y en silencio. Seguir recomendaciones médicas, aunque decidamos pedir más de una opinión, debería ser, en la mayoría de los casos, el mejor paso a seguir, recordando que el factor tiempo juega un papel determinante con esta enfermedad.

Sobre el páncreas

El páncreas es el órgano responsable de dos funciones importantes: la producción de los jugos digestivos y el control de la hormona insulina, que regula la utilización del azúcar en nuestro organismo. El cuerpo humano fue creado para tener un funcionamiento integral y es por ello que cuando un mal invade alguna parte de nuestro organismo lo lógico es que se corra o extienda y afecte nuestro sistema, en cadena. Así, el cáncer de páncreas se va moviendo y atacando los tejidos y por lo general, cuando lo descubren, es en su etapa avanzada, cuando ya ha afectado algunos de sus órganos vecinos, a saber: estómago, hígado e intestinos. De acuerdo con la Sociedad Americana contra el Cáncer: “…el páncreas descansa en forma horizontal detrás de la parte baja del estómago. Por eso su propagación es rápida y ello explica que rara vez se detecte en su etapa de inicio”.

El pronóstico del cáncer de páncreas no siempre es alentador, pero si detectado a tiempo, y dependiendo del tipo de tumor, hay supervivencia. En ocasiones resulta complicado distinguir el cáncer maligno en el páncreas de otra condición llamada pancreatitis autoinmune. Esta última es una condición benigna, que tratada a tiempo, mediante el uso de esteroides, no requiere cirugía. Cuando el cáncer se ha extendido al hígado, los pulmones, o los huesos, se utiliza el término de metástasis. Si el carcinoma pancreático es muy avanzado, es prácticamente difícil removerlo por completo mediante cirugía. Informes de la Clínica Mayo y sus Centros y Clínica de Cáncer en Arizona, Florida y Minnesota, advierten que cada año ellos reciben 1,900 casos de cáncer pancreático. Mientras, la Sociedad Americana contra el Cáncer dice que cerca de 45,000 personas son diagnosticadas anualmente con este tipo de cáncer.

Factores de riesgo

El cáncer de páncreas predomina entre:

•Fumadores
•Personas con sobrepeso y obesidad
•Pacientes mayores de 45 años
•Hombres más que mujeres
•Personas que ya han padecido cáncer
•Individuos que han estado expuestos a riesgos químicos
•Personas de raza negra
•Pacientes de cirrosis de hígado por hepatitis o alcohol
•Personas diabéticas

Indicadores o síntomas de cáncer pancreático

Aunque la Sociedad Americana del Cáncer advierte que sólo un profesional puede hacer un diagnóstico y respectivas sugerencias, hay algunos indicadores, que no necesariamente significan padecer esta condición, pero que han demostrado son algunos a considerar:

•Ictericia – Desarrollo de color amarillento, tanto en la piel como en la parte blanca de los ojos
•Dolor abdominal – El 80% de los pacientes con cáncer de páncreas manifiestan dolor abdominal o lumbar
•Pérdida de apetito y de peso, sin motivo aparente, sin dieta ni ejercicio
•Inflamación del abdomen o el tracto digestivo y gases, especialmente luego de ingerir alimentos
•Evacuaciones descoloridas
•Nausea estomacal y episodios de vómitos frecuentes
•Diagnóstico de diabetes – Cuando el cáncer de páncreas está en su fase más avanzada altera la producción de insulina y puede confundirse con diabetes
•Dermatitis – La piel puede tornarse reseca, escamosa, deshidratada y sentir picor.

Diagnóstico

Ante la posibilidad de este cáncer, su médico primario:

•Hará una exploración física para verificar si hay masas palpables, agrandamiento o inflamación de algún órgano y/o acumulación de líquidos.
•Ordenará laboratorios completos y específicos de sangre y orina
•Revisará los ganglios linfáticos para asegurarse no estén inflamados ni haya abultamientos.
•De acuerdo a los hallazgos, determinará si debe visitar o consultar otros médicos especialistas que pueden llegar a integrar el equipo que le dará seguimiento si se detectara la enfermedad.
•Posiblemente le ordene estudios de avanzada tecnología: CT Scan, MRI, Ecografías, Biopsias, Angiografías, entre otros muchos.
La medicina y los avances tecnológicos contribuirán a distinguir y localizar las áreas afectadas y el estadio o desarrollo del cáncer. A partir de ese conocimiento los tratamientos pueden incluir quimio y radioterapia.

El conocimiento de la historia de Steve Jobs, y de tantas otras personas cercanas, nos hace recordar que las grandes enfermedades actúan en silencio mientras invaden nuestro organismo.

Este reportaje pretende recordarnos lo importante que es visitar nuestro médico y hacernos las pruebas necesarias ante cualquier síntoma que represente cambios en nuestro organismo o modo de vida. No olvidemos, de todas formas, que ante un diagnóstico semejante no puede faltar, adicional a la ayuda médica, encomendarnos, con absoluta confianza, al Máximo Hacedor.


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