El Reflujo
Por: Sylvia A. Agostini editorial@placerespr.comEl reflujo, o enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) es cada vez más frecuente debido a que por nuestra agitada vida no atendemos nuestro organismo como es debido. De ahí a que, situaciones ocasionales o las primeras señales de esta y otras condiciones nos pasan inadvertidas. Cuando algo nos afecta de forma consistente, podemos llegar a tener síntomas y situaciones agudas. Tal es el caso de la acidez estomacal, que controlas con medicamentos que tienes a tu disposición, pero que cuando es frecuente puede indicar que sufres o padeces ERGE. Podrás comprobarlo cuando tu acidez viene acompañada de la repetición y ácidos que fluyen desde el estómago, hacia el esófago y hasta la garganta. Esto irrita y lacera los órganos en menor o mayor grado.
Algo no está funcionando bien. Y es que, al final del esófago hay un anillo de músculo, llamado esfínter esofágico inferior, que actúa como una válvula entre el esófago y el estómago, y que cuando no cierra bien permite que los ácidos y algún contenido estomacal se descarrilen hacia las áreas mencionadas. Muchos sabemos reconocer como se produce una sensación de quemazón e irritación en el centro del pecho, los bronquios, y la garganta.
Algunas personas padecen de reflujo y no lo perciben porque no sienten la acidez y porque las señales se manifiestan durante sus horas de sueño. Por lo que, en ocasiones, al levantarse notarán irritación en su garganta, alguna afonía, tos seca y hasta dificultad para tragar y respirar en casos extremos. Cuando tu acidez es mínima y ocasional un simple anti-acido recomendado por el farmacéutico aliviara la molestia. Cuando descubres que tu acidez es aguda tienes que comenzar a modificar tus estilos de vida y trabaja con tu dieta. Muchos de los síntomas que padecemos se alivian rápidamente mientras más benigna sea la condición. Sin embargo, esto permite que continuemos descuidando la dieta y el tratamiento que pueden evitar convertir ésta condición en una aguda..
Lo que debes evitar
Durante una crisis, debes evitar: Fumar, el alcohol, consumir sodas con cafeína, el café, frituras y grasas en exceso, el ajo, la cebolla, la menta, los alimentos picantes, los cítricos, el tomate y en algunos casos, los productos lácteos. Con el tiempo vas a poder identificar qué cosas te hacen más daño y las eliminarás totalmente de tus hábitos o consumo. De otra parte, habrá algunas que con no excederte, será suficiente para evitar la crisis.
Si tu condición no mejora, te recomendamos sacar cita con un gastroenterólogo para tener un diagnóstico y trabajar de forma adecuada con tu condición. Cualquier persona puede padecer ERGE; pero solo un profesional de la salud puede confirmarlo con los estudios indicados y recomendarte la dieta y el tratamiento que mejor responde a tu condición.
Aunque no se conoce la causa exacta del reflujo, se dice que la existencia de una hernia de hiato puede contribuir o predisponer a ello.